Sí, lo sé, quizá sea un poco exagerado el título, quizá sería más realista haber titulado este post "Un grano de arena" pero debéis reconocer que suena mucho más interesante y musical para un blog de teatro.
En realidad, en esta ocasión me salto mis propias reglas para escribir algo que no tiene como fin difundir el teatro sino algo mucho más importante: las personas, los sentimientos, las emociones... Quiero aprovechar este inciso para hacer mi propio homenaje a todos los que estáis (y estamos) relacionados con el teatro porque somos esos granitos de arena que, cuando se unen, forman la playa y cuando luchamos juntos, creamos montañas.
Anoche Montse me hizo una pregunta que no me esperaba... si seguía yo escribiendo este blog... Y lo cierto es que este blog es un pedacito de mi que, egoístamente, estaba dejando morir. Buscar la información, editarla, publicarla y difundirla es una tarea muy dura cuando el tiempo libre escasea y, en un punto de mi vida en que decidí mirar mi ombligo, rompí todos los vínculos con aquello que tantas penas y alegrías me había dado en la vida. Dice un provervio ruso "caer está permitido, levantarse es una obligación", siempre es más sencillo levantarse cuando hay una mano cerca, dispuesta a ayudar. A veces nos obcecamos tanto en conseguir nuestros objetivos que nos olvidamos de lo que realmente importa. Hace ya unos cuantos años, fue Fran quien me dio ese empujoncito para seguir publicando este blog, una tarde en la que, sin conocerme de nada, se me acercó para pedirme que por favor no dejase de escribir. Anoche fue Montse quien me hizo recordar que éste no es un blog cualquiera, sino el archivo que preserva la historia más reciente del teatro de nuestro municipio. No sé si eras consciente de que estabas tocando dos fibras con una sola mano: por un lado, mi pasión por el teatro y por otro, mi devoción por la documentación. Ambas son lo que me definen a pesar de que he luchado contra ellas durante casi un año.
Así que este post va dedicado a todos los "teatreros" que de un modo u otro está construyendo la historia teatral de Cartagena. Sois ese "rayo de sol" que unas veces ilumina y otras calienta pero como aquí ya estamos acostumbrados a las altas temperaturas... seguiremos haciendo historia juntos, ¿no?
